miércoles

Derribar para Construir

Imagina por un momento que un empresario de la construcción decide comprar un gran solar para iniciar una obra monumental. Contrata al mejor arquitecto, desarrolla el mejor diseño posible, realiza los planos con exactitud milimétrica y se asegura de tener suficientes recursos como para realizar la más hermosa edificación de todos los tiempos.

Debido a que viaja mucho, decide encomendar la construcción a una contrata "de buen nombre" y delega la construcción del edificio en ellos, para que las obras no se demoren por su ausencia.

Pasa el tiempo, y cuando el empresario viene con expectación a contemplar el desarrollo de su obra cumbre, se encuentra la desolación de que los encargados de la contrata han decidido hacer algunas "mejoras" a los planos por propia iniciativa, al punto de que el proyecto ya no se parece en nada al original.

¿Qué piensas que hará el empresario? Sin duda, mandar ante los tribunales a estos malos constructores por no haber cumplido el contrato, por no hacer lo que se les había encomendado ¿Verdad? Es más, luego, muy a su pesar, se verá obligado a demoler la construcción hasta los cimientos, hasta el punto en el que comenzó a desvirtuarse, para levantar nuevamente el proyecto que en principio tenía pensado... ¿Y quién crees que pagará los gastos de demolición, y reconstrucción?

Leamos ahora un pasaje de la Biblia, en el que vemos la manera en que Dios llamó a Jeremías para que hablara de su parte, es decir, para ser profeta:

Mira, hoy te doy autoridad sobre naciones y reinos, "para arrancar y derribar, para destruir y demoler, para construir y plantar." (Jeremías 1:10)

Dios es como ese empresario, que dejó unos planos perfectos pero no encontró a los edificadores fieles. Eso no quiere decir que haya fracasado, solamente que buscará edificadores de confianza para construir lo que de veras quiere. En tiempos de Jeremías ya pasó, y lo expresó con claridad: Te he puesto para... Derribar... y para poder Construir después.

¿Crees que es posible construir algo admirable sobre cimientos erróneos y estructuras torcidas? NADIE en su sano juicio "aprovecharía" los materiales viciados de un edificio mal edificado, y menos aún Dios, quien desde luego, no tiene falta de "recursos financieros". Por eso es que hoy día, como la historia es cíclica y se repite de continuo, y tanto más ahora que estamos a la espera de la manifestación de todas sus promesas en estos "últimos tiempos", Sus Palabras cobran vida, y busca personas fieles que, como Jeremías, estén dispuestos a derribar y destruir todo lo torcido, para poder construir y plantar lo correcto. Justo ese es el propósito principal de este blog.

Pero ¿Qué hay que derribar? ¿Qué cosas hay que cambiar?

Muchas, desde luego. Un solo artículo no puede contenerlo todo, a lo largo del tiempo, y con la ayuda de Dios, iremos viendo diversos temas en los que hemos de ARREPENTIRNOS, cambiar de camino y retomar el correcto, demoler las edificaciones torcidas y edificar la que Dios tenía planificada desde el principio de los tiempos. Te dejo algunas ideas a modo de ejemplo:

Dios quiere construir un edificio llamado iglesia, con piedras vivas que son los creyentes sinceros (personas)... Pero a veces nos preocupamos más por construir "iglesitas" (de ladrillo) por doquier. 1ª Pedro 2:5 dice: "Vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo."

Dios quiere sacrificios espirituales, pero nosotros nos empeñamos en hacer sacrificios materiales. Limpiamos lo de fuera del plato y nos preocupamos de lo externo, miramos la apariencia, olvidando lo que de verdad importa, que es invisible y espiritual. Dice Mat 23:25 ¡¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque limpiáis lo de fuera del vaso y del plato, pero por dentro estáis llenos de robo y de injusticia. Dios quiere un edificio limpio y hermoso, y nosotros lo ensuciamos por dentro, dejando que solo "la fachada" esté bien bonita. Decimos una cosa... Hacemos otra.

Dios quería convertir su casa en un lugar para la mutua edificación, donde todos cumplieran su labor... Pero nosotros hemos preferido idolatrar a personas que se ponen solitarias al frente, tomando la responsabilidad de todas las decisiones, y nosotros ni preguntamos, ni indagamos qué piensa Dios de todo esto... Preferimos lavarnos las manos como Pilato y decirle a Dios "No me culpes a mi de los errores del pastor. Si él se equivoca no es mi culpa, yo solo me someto y con eso cumplo". ¿De verdad es así de simple? Pero entonces ¿Para qué puso Dios a los demás ministerios de la iglesia, los demás pilares: Apóstoles, profetas, evangelistas, maestros, administradores...? 1Cor 12:28 dice: "En la iglesia Dios ha puesto, en primer lugar, apóstoles; en segundo lugar, profetas; en tercer lugar, maestros; luego los que hacen milagros; después los que tienen dones para sanar enfermos, los que ayudan a otros, los que administran y los que hablan en diversas lenguas."
Y en Efesios 4:11-12 "Él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; y a otros, pastores y maestros, a fin de capacitar al pueblo de Dios para la obra de servicio, para edificar el cuerpo de Cristo."

¿Y para qué te dio un cerebro inteligente? ¿Para guardarlo sin usar y tirar la llave al mar?

La lista sería extensa, y quedan temas vibrantes en el tintero, pero tiempo al tiempo. Lo importante en este punto, es tomar una actitud honesta. No se trata de descalificar a nadie, ni a personas, ni a grupos. Pero Dios quiere una iglesia santa, recta, sin arrugas, diferente y que sea luz verdadera. Es tiempo de orar a Dios que despierte nuestro entumecido discernimiento, para que empecemos a alumbrar a este mundo con la luz de la santidad...

Mateo 6:23b dice: ... "Así que, si la luz que hay en ti es tinieblas, ¿Cuántas no serán las mismas tinieblas?"

Si tu luz no puede ser vista por otros con claridad, si no eres capaz de alumbrar, es porque lo que tú crees que es luz en ti no lo es realmente, porque estás haciendo las cosas según los rudimentos del mundo y no según la sana doctrina del Evangelio. Entonces, tanto más necesitas la ayuda de Dios, y quizás, cambiar de camino. Necesitamos TODOS escuchar personalmente, individualmente, y de forma clara, la voz del Espíritu Santo.

Piensa en esto: Dios es muy grande para encerrarlo entre las cuatro paredes de un templo, y demasiado sabio para encerrar su entendimiento en los credos denominacionales y las doctrinas humanas...
ÉL ES DIOS Y ESTÁ POR ENCIMA DE TODO ESO...

16 comentarios:

superquo dijo...

Hola, David

Acabo de aterrizar en tu blog y no te imaginas de qué manera me ha sorprendido que hayas puesto en palabras muchos de los pensamientos que circulan por mi mente. Si encima nos llamamos igual y somos del mismo país, ¡figúrate qué coincidencia!
Antes de continuar ojeando tu blog, no obstante, me apetecía dejarte este saludo.
Te felicito por el enfoque constructivo de tu post. Espero continuar encontrando puntos en común en tus reflexiones.
Un saludo
David

David López-Cepero dijo...

Hola David, me alegro de conocerte, y sobre todo por la "cercanía..."
Dios quiera que cuanto puedas leer en este sitio sea de ayuda para ti y para cuantos pasen por aquí, pues no hay otro propósito que el de mostrar a Jesús tal cual es... aunque haya que derribar muchas barreras y prejuicios.
¡Gracias por tu ánimo!

Luis Enrique Alvarado dijo...

Dios te bendice David
Muy buen ariculo Dany, sabes se me vino a la mente algo.... el evangelio puro es como una de esas bolas de acero que derriban los edificios, que fuerza, que poder, nada se puede resistir a ello, asi es cuando sale de nuestra boca cuando lo predicamos, sabes hay muchas cosas que tenemos que derribar para realmente edificar.

Muy bueno Dany, sabes permiteme enlazarte de mi blog, mucha gente sera edificada.

Atte.
Luis E. Alvarado

David López-Cepero dijo...

Hola Luis Enrique, tienes mucha razón con respecto a esa "bola gigante". A mí me gusta también este otro texto:

Jer 23:29 ¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como MARTILLO que quebranta la piedra?

Creo que ese martillo sería ahora, en tiempos modernos, como esa demoledora bola que citas... Construir sobre un edificio en ruinas, no solo es peligroso sino descabellado. Igualmente, edificar sobre un evangelio "light" o "diet" o "descafeinado", está igualmente abocado a la ruína.

Muchas gracias por tu visita.

David Franco (David Alberto Franco) dijo...

Qué tal tocayo:
Tengo en mis recuerdos más lejanos, la memoria de haber estado en construcciones en obra negra. Esto porque mi padre fue contratista en una época de su vida.

No recuerdo alguna demolición, pero sí muchas excavaciones para los cimientos. Esta imagen me recuerda que, ninguna obra que vaya a ser duradera, fuerte y bien construida, se levanta sobre el piso plano, ruinas o deshechos. ¡Los cimientos lo sostienen todo!

Gracias por tocar este tema que tanta falta hace en muchas (si no todas) las iglesias hoy en día, y no porque no se trate de cuidar esa base que es Jesucristo, sino porque hay muchos "contratistas" que quieren eliminar los cimientos de los planos.

Como siempre, estaré a la espera de tu segunda entrega.

Que Dios te siga bendiciendo.

David Franco (David Alberto Franco) dijo...

Ja, llegué un poco tarde y pensé estar en el artículo más reciente, tocayo. No importa, digo lo mismo, seguiré leyendo...

Saludos.

David López-Cepero dijo...

Hola David. Un comentario enriquecedor y una palabra de ánimo nunca llega tarde ni en mal momento, así que no te preocupes.

¿Sabes? acabo de escribir en el comentario de otro blog algo muy parecido a lo que citas: Los cimientos lo sostienen todo. Que bueno que puedas tener esos recuerdos, porque a veces, esas experiencias gráficas aumentan el poder de ciertas palabras como por ejemplo: "sobreedificar sobre la Roca, que es Cristo"

Gracias por pasar por aquí, peregrino.

Aloha dijo...

Hola David:

Pues mira, relacionado con ésta entrada que te leo, sigo un blog de psicología, donde leí no hace mucho una entrada relacionada. Te dejo el enlace.

http://psicoapertura.blogspot.com/2009/02/destruir-para-luego-re-construir.html

Desde luego, si en nuestro día a día no derribamos aquellas cosas que no sirven para nada, que son inútiles, que ocupan espacio para no dejar sitio a lo nuevo, acabamos en la ruina emocional, espiritual, y física. Porque la belleza externa es un claro reflejo de la belleza interna.

Muy buenos también tus escritos. Son constructivos.

Besos.

Aloha.

David López-Cepero dijo...

Hola Aloha. Estuve leyendo el post que citas, y es interesante la forma en que plantea el asunto. Lo que destaco, (y que es común en ambos lugares) es que no se trata en ningún caso de destruir algo por el simple hecho de romperlo, ni por dañar, todo lo contrario, sino con el firme propósito de arreglarlo, ya sea que hablemos de relaciones personales (como cita el blog al que te refieres) como de otros asuntos, como errores doctrinales, hipocresías varias, mitos que nos desvían...

Gracias por tu aporte, por tu lectura, y por comentar. Nos leemos y
¡Hasta la próxima!

DavidF dijo...

Que tal tocayo, hace tiempo escuche a un hombre de Dios como pocos he conocido (el ya esta con el Señor) decir que las denominaciones era solamente los andamios que Dios habia utilizado para construir su verdadera iglesia, la esposa del cordero, realmente, el se referia a la denominacion como todo aquello que implica un esfuerzo humano, por lograr una organizacion humana para edificar a la iglesia, poniendo a Jesus a un lado, olvidando sus palabras "Yo edificare mi iglesia, y las puertas del infierno no prevaleceran contra ella" El es quien edifica, el es el fundamento, el aqrquitecto, el ingeniero y el constructor, olvidamos que solo somos "chalanes" como decimos aqui en mexico y que estamos a las ordenes de El, y que como tu has dicho nuestra unica participacion es seguir los planos al pie de la letra sin agregar ni quitar nada.
Dios les bendiga.

David López-Cepero dijo...

Amén tocayo, amén...

Cristian dijo...

La verdad que desde que me mude a un alquiler apartamentos buenos aires, estoy pasando mucho mas tiempo frente a la PC y al ver tus posteos del blog, creo que son muchos de los comentarios, que podría tranquilamente yo escribir

Anónimo dijo...

KontraCultura: Hola amigo bendiciones sobre tu vida en el nombre de Yeshua! queria informarte que la informacion puesta en tu blog es excelente! te felicito por la valentia de Salir contra la corriente y sacar la verdadera de Yeshua... tambien te informo que estamos en la misma tarea cm ministerio y en un programa radial que se llama KontraCultura y estamos usando informacion de tu blog y por su puesto dandole los creditos que se merece este excelente blog. Shalom!

Bárbara Reyes dijo...

Me gusto el blog,porq andaba buscando esta cita biblica;Jeremia:1:10;y encontre la respuesta;ahora explicare el significado de ese versiculo con mas claridad,,Dios le bendiga...

Anónimo dijo...

SE HA MASCULINIZADO MUCHO LA PALABRA DIOS..DIOS CREADOR Y CRIADOR SIGNIFICA FAMILIA.LA INTIMA UNION DE UN SANO ROL PATERNAL EN EL VERDADERO AMOR Y RESPETO.UNIDO A UN SANO ROL MATERNAL EN EL VERDADERO AMOR Y RESPETO.PARA QUE NUESTRA DESCENDENCIA SEA AMOROSA Y CREATIVA CON UN OBJETIVO COMUN..CONOCER A DIOS VIA ESPIRITUSANTO.VIVO EN CADA UNO DE NOSOTROS.MIENTRAS NO LO ENTENDAMOS ASI ESTE MUNDO IRA DE MAL EN PEOR.EL MUNDO ESTA MUY SEPARADO DE DIOS.BENDICIONES DESDE CHILE AL MUNDO ENTERO.

Anónimo dijo...

SE HA MASCULINIZADO MUCHO LA PALABRA DIOS..DIOS CREADOR Y CRIADOR SIGNIFICA FAMILIA.LA INTIMA UNION DE UN SANO ROL PATERNAL EN EL VERDADERO AMOR Y RESPETO.UNIDO A UN SANO ROL MATERNAL EN EL VERDADERO AMOR Y RESPETO.PARA QUE NUESTRA DESCENDENCIA SEA AMOROSA Y CREATIVA CON UN OBJETIVO COMUN..CONOCER A DIOS VIA ESPIRITUSANTO.VIVO EN CADA UNO DE NOSOTROS.MIENTRAS NO LO ENTENDAMOS ASI ESTE MUNDO IRA DE MAL EN PEOR.EL MUNDO ESTA MUY SEPARADO DE DIOS.BENDICIONES DESDE CHILE AL MUNDO ENTERO.

¿Qué es un MITO?


Un Mito es una cosa que no tiene una realidad concreta, que puede llegar a ser una fábula, una fantasía. Cuando un mito se confunde con algo real, la verdad se distorsiona. Algo así ha sucedido con el cristianismo actual, del que muchos escapan por el mítico concepto que tienen de él. Aún estamos a tiempo de hablar las verdades, a la luz de las Escrituras, la Palabra fiel y verdadera de Dios.