martes

Los Tres Reyes Magos

Bueno, este no será un tema de alta importancia ni trascendencia quizás, y es posible que el artículo se limite a decir cosas que muchos saben, pero nunca está de más aclarar, justo un día como hoy, cuando se celebra esta festividad de tradición cristiana de "Los Reyes Magos".

Como indica la palabra tradición, esto se trata de una serie de noticia, doctrinas, ritos y costumbres, hecha de generación en generación. Y a lo largo de los años se le han añadido muchas cosas que no aparecían en la historia original.

Este artículo no pretende ni ser absolutista ni discutir con nadie acerca del tema, pues cada cual cree en lo que quiere creer, y pone su fe o confianza en lo que estima más confiable. Por lo tanto, como cristiano, creo que lo más fiable que tenemos hoy día es la Biblia (aún a sabiendas de que el canon bíblico podría discutirse en ciertos casos) pero los que creemos en Jesús no tenemos otro punto de partida más seguro que este en nuestros días.

La idea de los tres reyes magos surge de una historia bíblica relatada en Mateo 2:1-12, donde unos personajes llamados "magos" se presentan en Jerusalén, ante el rey Herodes, siguiendo una señal en los cielos, en busca del rey nacido en Israel. Herodes consulta con sus entendidos y le dicen que el lugar destinado para tal evento era Belén. El rey, conmovido por la noticia junto con toda la ciudad, pide a estos personajes que busquen en Belén y que le informen de cualquier hallazgo del supuesto rey nacido... Nada mejor que leer el pasaje bíblico para conocer la historia en más detalle.

Es curioso que de los cuatro evangelistas, ninguno cita este suceso, sólo Mateo, que quizás buscaba dar un mensaje más directo acerca de la venida de un rey prometido para los judíos, un Mesías, hincapié que no era el fundamental de los otros narradores. Es más, ni Marcos ni Juan hacen referencia al nacimiento en carne de Jesús en Belén, y sólo Lucas da un relato de lo sucedido, con la aparición de ángeles a unos pastores que cuidaban sus rebaños en plena noche, lo que descarta la fecha de Diciembre como probable para estos acontecimientos, debido a que ni en esa época se produce trasumancia de ganado, ni se trasnocha a la interperie ante las bajas temperaturas nocturnas.

Y digo que es curioso porque las historias de Lucas y Mateo se complementan en la historia, por no tratarse de dos versiones de un mismo suceso, sino de dos momentos DISTINTOS en la historia, separados por unos dos años el uno del otro. Podemos notarlo por varios detalles:

Por un lado, cuando Herodes se vio burlado por los "magos" (no le avisaron, sino que se fueron), dio la trágica orden de aniquilar a todos los niños de Belén y sus alrededores, a todos los menores de DOS años (no recién nacidos), porque leyendo con detalle podemos ver que antes, este rey había indagado acerca del tiempo en que los magos habían salido de oriente siguiendo esa señal. Esto nos indica que el suceso debió pasar cuando Jesús tenía más de un año de edad, y dada la cercanía geográfica entre Belén y Jerusalén (los "magos" no necesitaban muchos días de camino), esos dos años estimados por Herodes tras su charla con los magos podrían acercarnos a la edad real del acontecimiento en la historia: Dos años después del episodio del nacimiento del Mesías.

Otro detalle curioso es que en Mateo 2:9, cuando la "estrella" guía a estos magos al NIÑO, la palabra griega de la que se traduce este "niño" es "Paidión", que se usaba para referirse a niños en edad de crecimiento, pequeños, a medio madurar... Pero nunca para recién nacidos.

Una vez sacamos a los magos de la historia de la noche del nacimiento de Jesús, podemos examinar a qué se refiere esa palabra "magos" que los define:

Originalmente, en Babilonia había unos oficiales a los que se les llamaba "Rab-Mag" (en hebreo), algo así como "Jefes Mag". Esos "Mag" se relacionan en muchos casos con sacerdotes de Zoroastro. Cuando Mateo escribe y luego se transcribe al griego este "Mag", se usa la palabra "Mágos", la cual es sinónimo de científico, o sabio estudioso. Cuando esta palabra griega se tradujo al latín, derivó en "Magi", y en castellano quedó literalmente como "Mago", perdiendo su sentido original que, aunque ambiguo, indicaría más a una casta sacerdotal de Babilonia o Persia, o a unos científicos estudiosos de los astros que a unos seres mágicos.

Nos tendríamos que remotar al siglo XIV (si alguien conoce otro dato, agradecería que lo aportara para corregirlo) para encontrar a un monje benedictino que se decide a escribir acerca de esta história bíblica, y es entonces cuando aparecen por su invención los nombres de Melchor, Gaspar y Baltasar. Describió a todos como reyes, debido a que portaban tesoros (no hay más razonamiento por su parte que este), y dijo que eran tres porque tres fueron los presentes ofrecidos por ellos según el relato escritural (oro, incienso y mirra), aunque Mateo nunca cita que cada cual llevara su propio regalo, sino que el grupo (no sabemos si dos, tres, doce...) buscó entre sus tesoros para ofrecerle a Jesús estos regalos.

A uno, le dio el nombre de Melchor (Rey de luz, del hebreo "Malki-or"), y lo describió como un anciano de larga barba blanca montado en un caballo persa. A otro le llamó Gaspar, (del persa "Kansbar", que significa administrador del tesoro) se trataba de un joven de cabellos no tan oscuros y con tez de distinta tonalidad
; venía sobre un elefante, y procedía de la India ("la tradición" cambió después su precedencia a China). Al tercelo lo llamó Baltasar (de la palabra asiria "Bel-tas-assar" que significa que el dios Bel proteja al rey), y era de piel morena, de origen africano, y venido en camello...

Es como si un representante de Europa, otro de Asia y otro de África, se hubieran puesto de acuerdo para hacer este viaje, estableciendo en algún lugar de Persia o alrededores su punto de partida. Esto fue un intento de la iglesia católica de la época por universalizar el acontecimiento, y el mismo cristianismo, abriendo sus brazos a los árabes y a las otras razas mayoritarias, para "acercarles el cristianismo"...


Resumiendo, "Los Tres Reyes Magos de Oriente", ya que ni Mateo ni ningún otro da indicios para opinar lo contrario, ni eran tres, ni eran reyes ni eran mágicos... Es más, ni siquieran llegaron a tiempo a Belén para ver el nacimiento de Jesús; así que los que tengan maquetas o dioramas con "portales de Belén", si las quieren asemejar a la realidad, tendrán que quitar las figuritas de los "tres reyes"... Pero bueno, haciendo honor a la verdad ¿Alguno de nosotros podemos imaginar como fue aquella noche? Cantos celestiales, visiones de ángeles por un lado, y antes, soledad y olvido, la de un matrimonio que buscaba donde pasar la noche, donde alumbrar al hijo de Dios... Que terminó en el comedero de unos animales malolientes, y envuelto en tiras de tela: Dios se hizo hombre desde lo más humilde y escondido, y allí no vinieron reyes con tesoros, pero el Rey del cielo mandó a sus cohortes celestiales para avisar de semejante acontecimiento. Una paradoja ¿Verdad?



Por cierto, en vista de los acontecimientos actuales en Israel y Palestina, si los sabios de oriente vinieran hoy, creo que este dibujo reflejaría un poco su viaje:


Saludos a tod@s en este nuevo año que ha comenzado, que bien mirado, es un día más, de un mes más, de un año más...

Pero eso no me priva de desear que todo vaya mejor desde ahora en adelante para ti, que has llegado a leer hasta aquí, je, je. Creo que Dios te está ejercitando la paciencia con este blog.

Mi deseo para ti en el 2009: Paz, y que el reino de Dios venga... Pronto

20 comentarios:

Patricia dijo...

Es cierto David, que muchas de las historias se han ido adornando y cambiando con el transcurso del tiempo y las tradiciones. Aún así, todavía disfruto cuando mi nieto me cuenta con los ojitos abiertos como soles que los camellos se comieron el pasto y bebieron el agua que les dejó la noche anterior bajo el árbol, al lado de los zapatitos. ¡Bendita inocencia! Ya tendrá tiempo de darse cuenta de la realidad. Mientras tanto, espero que Dios me de la oportunidad de seguir jugando al rey mago, lo cual me hace ser, por un ratito, otra vez una niña. Un saludo desde el hemisferio sur (por cierto, aquí si que trasnochamos a la intemperie para estas fechas... ¡no se soporta el calor!)

macelot dijo...

Buen artìculo, tenìa cierta idea de que los magos eran zoroastristas cosa que me lo confirmaste, curiosamente el zoroastrismo fue una religiòn muy emparentada con la Judìa.

voy a agregar un comentario que le hice a la monja es sobre este tema:
"TSS!, mi segundo nombre es Baltazar ya te imaginarás el estigma que me cargo desde la pila del bautismo, afortunadamente tengo una alias que lo disfraza y me identifica en muchas partes y no es precisamente Macelot.
Pobres PADRES Magos que hacen maravillas para darle un pequeño presente a sus hijos fruto de mucho sacrificio y encima se llevan la gloria el Trio dinámico de los Reyes : Malechor, Gastar y Ba-asaltar."

Te saludo como siempre, a mi buen amigo y compañero de exilio y el padrino de mi blog por cierto ,no se me olvida.

Luis Enrique Alvarado dijo...

Muy bueno David, la verdad no recordaba cuando ni quien le puso nombre a los magos, excelente articulo.

Algo muy interesante que me gusta de este relato de los viajeros fueron sus presentes o regalos que le llevaron a Jesus, oro (Jesus es Rey)incienso(muestra la divinidad de Jesus y mirra(señal de sus sufrimientos)


Saludos amigo

David López-Cepero dijo...

Hola Patricia. Te entiendo bien, porque yo mismo permití a mi pequeño creer en "los magos de oriente"... Era una mezcla extraña la de saber que era una historia premeditadamente falsa con la ilusión de verle esperando algún regalo sorpresa... Si, yo lo he hecho, y también me ha gustado esconderme tras esos personajes.

Intenté desde el primer día, eso sí, decirle que no se sabía si eran tres, y que no eran reyes... Quitarle un poco de misticismo. Pero de Papá Noel el "usurpador", nada de nada; bastante propaganda le hizo a Coca-Cola para hacérsela yo.

Es difícil quitarle esa ilusión a un pequeñín, pero con 5 años, el mío era muy listo ya y no se tragaba la bola y vino la típica pregunta de:
"Papi, los magos no tienen tiempo para ir a tantas casas en una sola noche ¿Existen de verdad, o los regalos los traen los papás?

Bendita inocencia de los pequeñitos, que te da pena romper... Pero ahora me alegro que sepa la verdad, y en la respuesta al próximo comentario sabrás por qué.

Espero que las noches de Enero sean un poco más frías allá por tu precioso país.

Gracias por pasar. Saludos.

PDTA: NO dejes que tu nieto lea este artículo, je, je

David López-Cepero dijo...

Ja, ja, ja... El Trío dinámico de "Malechor" y compañía, muy bueno. Nosotros pagando y ellos quedando como "reyes" ¡Qué ironía!

Por cierto, me recordaste con lo de tu nombre que olvidé poner el significado de Gaspar y Baltasar, y lo acabo de añadir en el cuerpo del post.

Me imagino los inconvenientes del nombrecito, porque conozco a un Gaspar, y todo el mundo hace sus bromitas... Lo importante es todo lo que Dios te ha regalado para poder dar a otros, tus talentos, sus dones. Gracias por estar ahí, y gracias al nuestro Amigo por haber dejado que te conociera a ti y a tu "ingenio", y también gracias porque al fin te decidiste a publicar un blog muy peculiar, interesante y divertido.

Un fuerte abrazo, amigo

David López-Cepero dijo...

Hola Luis Enrique, gracias por pasar...

El Evangelista Mateo opinaba como tú, porque fue el que se preocupó de que este detalle de los presentes quedara registrado.

Antiguamente, era una costumbre agasajar a los reyes con los mejores obsequios de que se disponía cuando se los visitaba, y estos sabios, ya llevaban consigo tesoros para hacerlo, y escogieron esos tres... El acto en sí de ofrecer tesoros, y el de "adorar", como inclinarse ante Él, ya muestran la realeza que reconocieron en Jesús... Y se añade la simbología de la que hablas.

Un abrazo

David López-Cepero dijo...

PATRICIA, al final olvidé incluir el final a la respuesta a tu comentario, perdón.

Me alegro que mi hijo sepa la verdad, porque esto de los magos era para mí como una espina clavada. Siempre le enseño a hablar la verdad, procuro darle ejemplo para fomentar nuestra confianza, y consentir esa "mentira" y durante años, no me dejaba decirle tranquilamente "yo no te miento"... Sé que muchos no considerarán esto como una mentira, y sé que es un caso muy especial, pero ahora soy más libre, porque sé que no ando con mentiras con él, y aunque ya sepa que los "magos de oriente" no vendrán en sus camellos hasta casa, sabrá que tiene unos padres que lo aman, y que a pesar de todo le dejarán algún regalito, no por respetar una tradición, sino para que no sienta la tristeza de ver a todos sus primos y amigos con juguetes nuevos y él sin nada...

Es que estas tradiciones, aunque se las confronta, a veces encuentran a pequeñitos que necesitan madurar un poco antes de empezar a pelear batallas de fe y verdad, y encontrar el equilibrio de padres creyentes lleva también su tiempo de aprendizaje, sus aciertos y sus errores ¿No crees?

Saludos de nuevo

hapuc dijo...

David, que gusto saludarte de la blogosfera... jajaj... sabes se me abren demasiadas dudas respecto al tema de los reyes mago...

Este fin de semana fuí al norte de chile, unos de los cielos más hermosos del mundo, tomé hora para ingresar a un observatorio, estoy conicidentemente traajando en un programa del gobierno de mi país sobre astronomia...

Y me preguntaba sobre la seudociencia llamada astrologia ¿habrá Dios habaldo a través de las estrellas?, mmmmm

Porque esto de los reyes magos suena pagano, como el horoscopo que hasta yo he creído y he visto mis signo, no sé hay muchas dudas...

Pero tú articulo me parece altamente bueno, y gracias por pasar por el mio y postea por arriba...

Un abrazo y que tenga un feliz año nuevo

Patricia dijo...

David, lo entiendo perfectamente. Creo que como en muchos otros temas hay tantas variantes como personas; he conocido quienes al enterarse de la verdad se han resentido; otros (en mi caso al menos fue así) lo tomamos con una especie de ternura y nos hacemos "complices" para mantener la ilusión a los hermanos, primos, etc. más pequeños. Es cierto también lo que decís que los peques vienen cada vez más despiertos... nosotros nos tragábamos el cuento hasta más mayorcitos jajajaja. Si tenés ganas y tiempo pasá por mi otro blog http://ayerbuenosaires.blogspot.com donde escribí una pequeña historia sobre un recuerdo de Reyes de mi infancia. Un abrazo.

David López-Cepero dijo...

Hola Ivonne. Si ya digo que es curioso que solo uno de los evangelistas cite este relato... Los entendidos dicen que de un solo versículo no debemos sacar una doctrina (y yo no soy un entendido)

Pero ahí está el asunto. Leyendo el pasaje con detenimiento, vemos que hay un momento en que reciben revelación en sueño (Mt 2:12) para no volver a Herodes, de modo que no solo una estrella les guiaba, pero algo hay que no me cuadra, y quizás algún lector tenga una explicación pero, leyendo el verso 9 me pregunto ¿Como puede una estrella indicar con tanta claridad la posición de una casa concreta? Una región o ciudad, es ya difícil, con lo amplio que es el campo estelar, pero ¿Una casa?

Opciones habrá muchas que yo desconozco: O no era una estrella literal de las del cielo, o se refiere a otra cosa y tenemos una traducción dudosa... En fin, eso queda en el aire por mi parte también. Gracias a Dios, nuestra salvación no depende de este pasaje bíblico ¿Verdad?

Saludos, viajera, y que lo pases bien en la playa...

David López-Cepero dijo...

¿Qué tal Patricia? Esa complicidad... No digo justificarla, pero quiero creer que lo hacemos por amor, por esperar a que el niño pueda ser capaz de digerir lo que toooooooodos los otro niños (y mayores) le van a jurar y requetejurar que es verdad.

Para tu otro blog voy, allí nos vemos. Saludos!!!

ABEL ADAN dijo...

David

Tuve el atrevimiento de recortar el post imprimirlo y mostrárselo a mis sobrinitas. Además de interesante me pareció didáctico.

Creo que el Espíritu Santo guío a esos sabios; también les reveló que no volvieran a Herodes.

Algo curioso. El niño (EL SALVADOR) si fue encontrado en un pesebre; “Esto os servirá de señal: hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre”.

Pero cuando llegaron los magos a donde estaba el niño, ya estaba en una casa “Al entrar en la casa, vieron al niño con María, su madre, y postrándose lo adoraron”.

Dios te continúe bendiciendo

Anónimo dijo...

Fe o confianza, cuanta razón plantea tu post.
Te felicito, es un excelente relato que engancha fácilmente, y ante todo, aporta y se disfruta.

Slds.

David López-Cepero dijo...

Así es Abel, el niño estaba en su casa... Fueron los anónimos pastores los que vieron el cumplimiento de "encontrarlo envuelto en un pesebre", como relató Lucas.

Espero que tus sobrinitas se tomen bien la historia, je, je...

Gracias por dejar tu comentario.

David López-Cepero dijo...

Hola Bianca, gracias por pasar por aquí, y por dejar tu impresión. Tu visita es un gusto para mi.

Y sí, en esas cuestiones estamos, hay que decidir...

Saludos

Isa dijo...

¡Excelente post mi estimado Peregrino! y, ja,ja,ja,me dió mucha risa leer lo del "Trío Dinámico", je,je,y el buen Macelot que no se preocupe tanto por su nombre, que por acá -México- yo creía que Baltazar, era el mago que más regalos traía, ja,ja,ja,¡bendita inocencia! Y ya siendo cristiana (¡ups!, me leí como si hubiese tenido otra religión, je,je,lo que sucede es que me crié -teológicamente hablando- en la tierra de nadie)Pues sí, mis hijos sabían que "los magos" éramos nosotros, pero temblaban de emoción ante la llegada de sus juguetes. Es una lección que quisimos enseñarles como padres a aprender a esperar lo que se desea, porque todo tiene "su tiempo".Esperaremos hasta que se casen, para ver si aprendieron la lección. ¡Sigh!(suspiro) ¡espero que sí! No deseo llorar con ellos por no haber sabido esperar.
Gracias mi buen Peregrino por tan lindo post y por permitirme hacer de este comentario, casi un post ¡uy!.
Saludos.

David López-Cepero dijo...

Amiga Isa, puedes escribir lo que quieras, que palabras de tu "manantial" siempre refrescan el camino de viajeros y peregrinos, y además, me encantó leer sobre tu experiencia, porque me confirmas que los niños pueden tener la misma ilusión y expectativa, incluso sabiendo la "verdadera historia", y es que enseñar paciencia a los más pequeños, es una lección que seguro no cae en saco roto.

Gracias por regalarnos tus palabras.
Un abrazo

Anónimo dijo...

Hola amigo "Wanted" :)

Yo tuve solo una par de reyes magos de niña, Fidel no dio $ chance para mas, pero guardo muy gratos recuerdos de ellos.
Todo la informacion que compartes es bueno saberla y compartirla. Creo que cada padre sabe hasta donde deja llegar la inocencia y la ilusion infantil de sus hijos en estos temas.
Y gracias mi amigo por tus palabras en el blog, valen mucho.
Un abrazo a la distancia.

David López-Cepero dijo...

Ay Beatriz, ese Fidel... De todos modos, los gratos recuerdos pueden valer mucho más, porque perduran por años.

Y si en algo te ayudo, me alegro, pero si hay algo importante en todo esto, es que estés bien... Hay un tiempo para cada cosa, pero siempre es grato encontrar tu rinconcito con ese olor a mar y café.

Otro abrazo desde la lejanía, muy fuerte.

Anónimo dijo...

El relato aparece sólo en Mateo, y se contradice con la versión de Lucas que habla de un censo ordenado por Roma. Ahora, que los astrólogos vieran una estrella que los guiara, indican que el autor del relato no conoce nada de astronomía, las estrellas que vemos son más grandes que el sol y están muy distantes, no se pueden mover en línea recta ya que la tierra es una esfera en constante movimiento, lo cual hace imposible el relato, pero si suponemos que un objeto apareciera en el firmamento, que astrónomo diría que es porque va a nacer un rey? como se vinculan los reyes con los astros? la astrología y otras suertes de adivinación estaban prohibidas en el Antiguo Testamento, la conclusión es que el relato es falso, lamentablemente para los que creen en el día de reyes magos.

¿Qué es un MITO?


Un Mito es una cosa que no tiene una realidad concreta, que puede llegar a ser una fábula, una fantasía. Cuando un mito se confunde con algo real, la verdad se distorsiona. Algo así ha sucedido con el cristianismo actual, del que muchos escapan por el mítico concepto que tienen de él. Aún estamos a tiempo de hablar las verdades, a la luz de las Escrituras, la Palabra fiel y verdadera de Dios.